Eficacia del convenio regulador

4 de febrero de 2019

Una separación o divorcio de un matrimonio que se desarrolla por la vía del mutuo acuerdo supone que los cónyuges están de acuerdo en todos los aspectos que se derivan de la suspensión o extinción del vínculo matrimonial. Es decir, que ambos comparten la decisión de separase o divorciarse y además, existe un acuerdo respecto a las medidas aplicables a la familia: guarda y custodia de los hijos, régimen de visitas para el progenitor al que no se le ha otorgado la custodia, pensión de alimentos y compensatoria, atribución del uso y disfrute de la vivienda, etc.

En este tipo de procedimientos, junto a la demanda las partes tienen que acompañar el convenio regulador en el que se incluyen las medidas pactadas por los cónyuges.

El convenio regulador presentado al Juez será examinado por el mismo con el fin de dictaminar si existen medidas perjudiciales para alguna de las partes o para los hijos o ilícitas.

Posteriormente, el Juez llamará a las partes para que ratifiquen lo establecido en el convenio regulador y que, por lo tanto, lo contemplado en él es la voluntad libre y verdadera de los cónyuges. Si lo ratifican, el Juez incluirá las medidas en la sentencia.